SINOPSIS
Movie Short Review
English review
Tom Cruise is recognized for his dedication to the film industry, embodying Hollywood’s struggle against the digital revolution in both his on-screen and off-screen roles. As the icon of the “Mission: Impossible” series, Cruise sees digital innovations such as motion smoothing, venture capital, and artificial intelligence as threats to traditional filmmaking. The renowned actor has made it his personal mission to combat these changes, viewing them as attempts to degrade the cinematic experience, replace human intervention, and threaten the sanctity of reality in film. His concerns are also prominently featured in his films, notably in the Best Picture-nominated “Top Gun: Maverick” and his latest blockbuster, “Mission: Impossible – Final Judgment Part One”.
The “Mission: Impossible” series has managed to maintain its consistency by focusing on the vulnerabilities of its protagonist, Ethan Hunt. This focus on human elements contrasts with the digital age’s reliance on algorithms and data. Cruise’s character, Hunt, is portrayed as a superhuman capable of making impossible decisions while balancing intimate relationships and global threats. This narrative reinforces the overarching themes of technology versus humanity that have emerged in the series. The latest installment, “Final Judgment Part One”, elevates these themes by painting a dystopian future ruled by a rogue AI. It challenges the notion that the digital revolution is solely beneficial, highlighting the irreplaceable qualities of human touch in action sequences.
The film does not entirely condemn technology. Its marketing campaign showcased behind-the-scenes footage of Cruise performing a dangerous stunt that used a blend of practical action and digital enhancement. This seemingly contradictory stance reflects the broader industry’s struggle with incorporating digital tools without losing the magic of traditional cinema. The film features a climax that involves a moral dilemma encapsulating this struggle. It’s a striking combination of character-driven action and narrative, demonstrating the potential to achieve a balance between humanity and technology. Despite an uncertain future for both Hollywood and the world, “Final Judgment Part One” suggests that it’s never too late to adjust the course, serving as a hopeful reminder of the value of human choices.
Spanish review
Tom Cruise es reconocido por su dedicación a la industria cinematográfica, representando la lucha de Hollywood contra la revolución digital tanto en sus roles en pantalla como fuera de ella. Como el ícono de la serie “Misión: Imposible”, Cruise percibe innovaciones digitales como el suavizado de movimiento, el capital de riesgo y la inteligencia artificial como amenazas para la creación de películas tradicionales. El afamado actor ha convertido en su misión personal combatir estos cambios, que considera intentos de degradar la experiencia cinematográfica, suplantar la intervención humana y amenazar la sacralidad de la realidad en el cine. Sus preocupaciones también se destacan en sus películas, notablemente en la nominada a Mejor Película “Top Gun: Maverick” y en su última superproducción, “Misión: Imposible – Juicio Final Parte Uno”.
La serie “Misión: Imposible” ha logrado mantener su consistencia centrándose en las vulnerabilidades de su protagonista, Ethan Hunt. Este enfoque en elementos humanos contrasta con la dependencia de algoritmos y datos de la era digital. El personaje de Cruise, Hunt, es retratado como un superhumano capaz de tomar decisiones imposibles mientras equilibra relaciones íntimas y amenazas globales. Esta narrativa se suma a los temas predominantes de tecnología versus humanidad que han surgido en la serie. La última entrega, “Juicio Final Parte Uno”, eleva estos temas al pintar un futuro distópico gobernado por una inteligencia artificial renegada. Desafía la noción de que la revolución digital es únicamente beneficiosa, subrayando las cualidades insustituibles del toque humano en las secuencias de acción.
La película no condena completamente la tecnología. Su campaña de marketing presentó imágenes detrás de escena de Cruise realizando una peligrosa acrobacia que utilizó una mezcla de acción práctica y mejoramiento digital. Esta postura aparentemente contradictoria refleja la lucha más amplia de la industria con la incorporación de herramientas digitales sin perder la magia del cine tradicional. La película presenta un clímax que involucra un dilema moral que encapsula esta lucha. Es una combinación impactante de acción impulsada por personajes y narrativa, demostrando el potencial de alcanzar un equilibrio entre humanidad y tecnología. A pesar de un futuro incierto tanto para Hollywood como para el mundo, “Juicio Final Parte Uno” sugiere que nunca es demasiado tarde para ajustar el rumbo, sirviendo como un recordatorio esperanzador del valor de las elecciones humanas.
Movie information
// Bad Robot, Paramount Pictures, Skydance Productions, New Republic Pictures, TC Productions. // Director: Christopher McQuarrie // Cast: Tom Cruise, Hayley Atwell, Ving Rhames, Simon Pegg, Rebecca Ferguson, Vanessa Kirby, Henry Czerny
SOBRE EL DIRECTOR
El aclamado productor, director y ganador de un Premio de la Academia, Christopher McQuarrie, nació el 12 de junio de 1968 en Princeton, Nueva Jersey, EE. UU. Creció en Princeton Junction, Nueva Jersey, en donde trabajó como asistente en la Escuela Cristiana y más adelante en una agencia de detectives. Tiempo después se mudó a Los Ángeles para iniciar su carrera cinematográfica. En 1995, su guión para Los sospechosos de siempre, cinta dirigida por su amigo de la infancia, Bryan Singer, le valió el Premio de la Academia, el Premio BAFTA a “Mejor guión original”, el Premio Edgar Allan Poe y el Independent Spirit Award. The Wright’s Guild of America ha nombrado a Los sospechosos de siempre como uno de los mejores guiones de todos los tiempos. Dirigió A sangre fría (2000), protagonizada por Ryan Phillippe, Benicio Del Toro y James Caan. En 2008, produjo y coescribió, Operación Valquiria, protagonizada por Tom Cruise, la cual fue el inicio de muchos proyectos junto al actor. En 2012 volvió a trabajar con Cruise en Jack Reacher y a las pocas horas de terminarla ya estaba trabajando nuevamente con él, reescribiendo el guión para Al filo del mañana. Mientras trabajaban en el guion de dicha película, Cruise le sugirió a McQuarrie una idea que, más tarde, se convertió en Misión: Imposible: Nación rebelde (2015). Su más reciente proyecto es Misión: Imposible – Repercusión (2018), cinta que dirigió, escribió y produjo.