Amanda

SINOPSIS

Amanda, de 24 años, vive en su mayor parte aislada y no tiene amigos, aunque es lo que más desea en el mundo. Se embarcará en una misión para convencer a su amiga de la infancia de que todavía son las mejores amigas.

Movie Short Review

English review

Carolina Cavalli’s film “Amanda” draws a portrait of loneliness, focusing on the protagonist’s struggle to forge connections in a world often experienced through cinema screens. The titular character, Amanda, seeks to rekindle a childhood bond with Rebecca, a friend who hasn’t left her room in years. The intention behind this is touching: Amanda desires someone she can relate to and share the cinema experience with. She is depicted as a young woman trapped in her own world, whose manners and lifestyle frustrate those around her. Despite living in a luxurious environment, her idleness serves as both her refuge and prison, and any redeeming qualities she may have seem to fade as she continues to aimlessly drift in her pool of isolation and confusion.

Amanda, a 25-year-old with no friends, is often seen aimlessly wandering around her family’s villa. The character’s realism is amplified by Benedetta Porcaroli’s portrayal and the apt wardrobe choices of costume designer Francesca Cibischino. A notable aspect of the film is the lack of costume changes, which adds a touch of humor to Amanda’s attempts to avoid social interactions. Her surroundings seem to validate her withdrawal from society, with the large but welcoming family home in stark contrast to the somewhat inhospitable city. The film effectively employs a peculiar surrealism to depict the desolation that comes from having no one to talk to and the fear that social situations can induce.

The depiction of loneliness in Amanda shares similarities with past films that tackle the theme of youthful isolation, using stylistic elements that recall the works of Anderson and the eccentricity of Moonrise Kingdom. However, the film takes a darker turn, suggesting that beneath the comic relief and glimpses of hope lurks the monstrous presence of existential despair, a fear that torments many of the characters. It also reflects the modern challenges following the pandemic era, where the digital world mediates many of our interactions, and economic factors lead to an extended childhood. Yet, this somber undercurrent starkly contrasts with the film’s playful surrealism. As a result, the film seems caught between fantasy and reality, limiting its charm. Amanda is likely to resonate more with those who lead a life similar to its protagonist rather than providing reasons to change.

Spanish review

La película “Amanda” de Carolina Cavalli traza un retrato de la soledad, centrando la atención en la lucha de la protagonista por forjar vínculos en un mundo a menudo experimentado a través de las pantallas de cine. La personaje titular, Amanda, busca reavivar un vínculo infantil con Rebecca, una amiga que no ha abandonado su habitación en años. La intención detrás de esto es conmovedora: Amanda desea a alguien con quien pueda relacionarse y compartir la experiencia del cine. Se la describe como una joven atrapada en su propio mundo, cuyas maneras y estilo de vida frustran a quienes la rodean. A pesar de vivir en un ambiente de lujo, su ociosidad es a la vez su refugio y prisión, y las cualidades redentoras que pueda tener parecen desvanecerse a medida que continúa flotando sin rumbo en su piscina de aislamiento y confusión.

Amanda, una joven de 25 años sin un amigo a su nombre, se ve a menudo deambulando sin rumbo por la villa familiar. El realismo de la personaje se ve potenciado por la interpretación de Benedetta Porcaroli y las acertadas elecciones de vestuario de la diseñadora Francesca Cibischino. Un aspecto notable de la película es la falta de cambios de vestuario, lo que añade un toque de humor a los intentos de Amanda de evitar las interacciones sociales. Sus alrededores parecen validar su retiro de la sociedad, con el hogar familiar, grande pero acogedor, en marcado contraste con la ciudad algo inhóspita. La película emplea eficazmente un surrealismo peculiar para retratar la desolación que proviene de no tener a nadie con quien hablar y el miedo que las situaciones sociales pueden inducir.

La representación de la soledad en Amanda comparte similitudes con películas pasadas que abordan el tema del aislamiento juvenil, utilizando elementos estilísticos que recuerdan las obras de Anderson y la excentricidad de Moonrise Kingdom. Sin embargo, la película toma un giro más oscuro, insinuando que bajo el alivio cómico y los atisbos de esperanza se encuentra la presencia monstruosa de la desesperación existencial, un temor que atormenta a muchos de los personajes. También refleja los desafíos modernos posteriores a la era de la pandemia, donde el mundo digital media muchas de nuestras interacciones, y los factores económicos llevan a una prolongación de la infancia. No obstante, este sombrío trasfondo contrasta fuertemente con el surrealismo juguetón de la película. En consecuencia, la película parece atrapada entre la fantasía y la realidad, lo que limita su encanto. Amanda es probable que resuene más con aquellos que llevan una vida similar a su protagonista más que ofrecer razones para cambiar.

Amanda – Trailer oficial

Movie information

// Elsinore Film, Wildside, Tenderstories
// Director: Carolina Cavalli
// Cast:  Benedetta Porcaroli, Galatéa Bellugi, Michele Bravi, Monica Nappo, Margherita Maccapani Missoni, Giovanna Mezzogiorno

Score

7

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