SINOPSIS
Noruega, 1662. Una época peligrosa para ser mujer, cuando incluso bailar puede dar lugar a acusaciones de brujería. Zigri, una viuda del pueblo, tiene una aventura con un comerciante, es descubierta y enviada a la fortaleza de Vardø para ser juzgada como bruja. La hija de Zigri, Ingeborg, se adentra en territorios helados y yermos para intentar rescatar a su madre. Maren, hija de una bruja, la acompaña en su travesía. Su naturaleza salvaje y su espíritu invencible le dan a Ingeborg el coraje para arriesgarlo todo. En la fortaleza también hay otra mujer cautiva. Es Anna Rhodius, quien fue amante del rey de Dinamarca, pero fue enviada a la isla de Vardø después de perder su favor. ¿Qué hará y a quién traicionará para volver a su vida privilegiada en la corte?
BOOK SHORT REVIEW
ENGLISH REVIEW
During the winter of 1662-63, a total of 20 women died in the witch trials on the island of Vardø, located in the extreme northeast of Norway, far above the Arctic Circle. These women were tried for “making pacts with the devil.” Eighteen of them were burned at the stake, and two died under torture. Anya Begman’s novel “Las brujas de Vardø” is a fictionalized account of these events, with characters inspired by real people whose experiences are documented in trial testimonies. The author, who lived in Norway for a time, wrote this book with the aim of “giving voice to the women accused of witchcraft with tenderness, while revitalizing their seventeenth-century history with contemporary resonance.”
The narrative comprises two stories told in alternating chapters from different perspectives, highlighting the dangers of being a woman in a patriarchal society where men controlled all aspects of women’s lives. Anna Rhodius, the daughter of a physician and a talented healer, was once the mistress of the King of Denmark. Banished to Vardø, she longs to return to her privileged life and is willing to do almost anything to achieve it, even helping to prosecute other women for witchcraft. On the other hand, Ingeborg Sigvaldsdatter is the teenage daughter of Zigri, a woman accused of witchcraft after her affair with a local merchant was discovered. Accompanied by Maren, another teenager whose mother has already been condemned as a witch, Ingeborg undertakes a long and dangerous journey to Vardø to try to rescue her mother, who is imprisoned in the governor’s fortress. Anna’s story is told in the first person through letters addressed to the king, pleading for reinstatement in his favor, while Ingeborg’s story is narrated in the third person, offering a broader perspective of her struggles after the loss of her fisherman father and brother, which left her family in grief and poverty.
“Las brujas de Vardø” is a plot-driven novel that describes the events leading up to Zigri’s trial and its progression. The story moves at a relatively slow pace, with detailed descriptions of Ingeborg’s journey and Anna’s past affair, which can sometimes feel heavy. However, the writing is atmospheric, alternating between cold and Gothic tones. The depictions of romantic love and the betrayals that sometimes accompany it are beautifully evoked. The witch trial, which forms the climax of the novel, is powerfully violent, but the aftermath, where Maren and Ingeborg escape to lead lives of their own, feels redemptive and hopeful.
SPANISH REVIEW
Durante el invierno de 1662-63, un total de 20 mujeres murieron en los juicios de brujas en la isla de Vardø, situada en el extremo noreste de Noruega, muy por encima del Círculo Polar Ártico. Estas mujeres fueron juzgadas por “hacer pactos con el diablo”. Dieciocho de ellas fueron quemadas en la hoguera y dos murieron bajo tortura. La novela “Las brujas de Vardø” de Anya Begman es una recreación ficticia de estos eventos, con personajes inspirados en personas reales cuyas experiencias están documentadas en los testimonios de los juicios. La autora, que vivió en Noruega durante un tiempo, escribió este libro con el objetivo de “dar voz a las mujeres acusadas de brujería con ternura, revitalizando su historia del siglo XVII con una resonancia contemporánea”.
La narrativa comprende dos historias contadas en capítulos alternos desde diferentes perspectivas, resaltando los peligros de ser mujer en una sociedad patriarcal donde los hombres controlaban todos los aspectos de la vida femenina. Anna Rhodius, hija de un médico y talentosa sanadora, fue amante del rey de Dinamarca. Desterrada a Vardø, anhela regresar a su vida de privilegios y está dispuesta a hacer casi cualquier cosa para lograrlo, incluso ayudar a procesar a otras mujeres por brujería. Por otro lado, Ingeborg Sigvaldsdatter es la hija adolescente de Zigri, una mujer acusada de brujería tras descubrirse su romance con un comerciante local. Acompañada por Maren, otra adolescente cuya madre ya ha sido condenada como bruja, Ingeborg emprende un largo y peligroso viaje a Vardø para intentar rescatar a su madre, quien está encarcelada en la fortaleza del gobernador. La historia de Anna se cuenta en primera persona a través de cartas dirigidas al rey, suplicando ser reinstalada en su favor, mientras que la de Ingeborg se narra en tercera persona, ofreciendo una perspectiva más amplia de sus luchas tras la pérdida de su padre y hermano pescadores, lo que dejó a su familia en duelo y pobreza.
“Las brujas de Vardø” es una novela impulsada principalmente por la trama, que describe los eventos que llevan al juicio de Zigri y su desarrollo. La historia avanza a un ritmo relativamente lento, con descripciones detalladas del viaje de Ingeborg y el pasado de Anna, que a veces pueden parecer pesadas. Sin embargo, la escritura es atmosférica, alternando entre tonos fríos y góticos. Las descripciones del amor romántico y las traiciones que a veces lo acompañan están bellamente evocadas. El juicio de brujas, que forma el clímax de la novela, es poderosamente violento, pero el desenlace, donde Maren e Ingeborg escapan para vivir sus propias vidas, resulta redentor y esperanzador.
// Autor: Anya Bergman // Editorial: VIDIS
SOBRE EL AUTOR
Anya Bergman nació en Londres y se interesó en los juicios a las brujas de Vardø y los cuentos folclóricos escandinavos cuando vivió seis años en Noruega. Quedó fascinada por sus historias y recorrió varias veces los lugares reales, donde aún hay restos de la fortaleza donde eran encerradas, y hasta un monumento a todas las mujeres que allí murieron en la hoguera. Las Brujas de Vardø se convirtió así en su primera novela. Actualmente reside en Irlanda y está realizando un doctorado de la Universidad Napier de Edimburgo, Escocia, donde también da conferencias y ofrece tutorías de su especialidad.