SINOPSIS
Del alerce, «árbol cósmico por el cual descienden el sol y la luna», al roble con su fuerza heráldica; del haya, «árbol feliz de los dioses», al tejo, símbolo de la muerte y la eternidad: Rigoni Stern escoge veinte árboles muy queridos para contarlos, repasando sus características botánicas y ambientales, ilustrando su historia y riqueza, explicando el influjo que han ejercido en la cultura popular y la literatura, y animando su arboretum con las experiencias propias del hombre de montaña, con los recuerdos y la nostalgia de «cuando los hombres vivían con la naturaleza».
Las descripciones se entretejen con las reflexiones personales del escritor, que percibe una consonancia de vivencias y destinos entre las personas y los árboles, contenidos en la parábola eterna de nacimiento y muerte, alegría y sufrimiento; destinados tal vez a vivir mucho tiempo pero condenados, en cualquier caso, a desaparecer y ser remplazados.
BOOK SHORT REVIEW
ENGLISH REVIEW
Mario Rigoni Stern invites us on an extraordinary journey through the forests in his work Arboreto Salvatico, a book that combines science, literature, and the poetic sensitivity that defines his style. Cedars, firs, chestnuts, walnuts, and countless other trees come to life on its pages, where each is described not only through its physical characteristics but also through the soul it seems to embody, woven from stories, anecdotes, and legends accumulated over centuries. It is impossible not to think of Jean Giono and his famous tale of the man who planted trees when diving into this work, which exudes a profound love for nature.
Rigoni Stern achieves an admirable balance between scientific precision and personal narrative, creating an intimate “circle of trees” that connects the reader with their own memories and collective memory. Each tree he describes holds a special place in his life, many of them planted with his own hands and watched as they grew around his home. In this sense, the author shows us how landscapes, as they transform, also enrich the human soul. The reading invites us to reflect on our connection with nature and to value the experience of planting, nurturing, and growing alongside a tree.
The book stands out for its structure of brief stories, each dedicated to a particular tree, evoking the connection between the author and his surroundings. With his simple and poetic style, Rigoni Stern intertwines episodes from his life with historical and cultural references, guiding the reader to explore the essence of each tree. This work is reminiscent of The Periodic Table by Primo Levi, where each chemical element served as a framework for narrating vital experiences. Both authors, united by similar wartime experiences and a deep postwar friendship, share values that resonate in their works: the importance of memory, nature, and the legacy we leave behind.
Reading Arboreto Salvatico is much more than a literary experience; it is an invitation to connect with nature through reflection and wonder. As the author describes, each tree offers us a lesson in life, justice, and resilience. For those fortunate enough to wander through forests or sit beneath a centuries-old lime tree, this book becomes an indispensable companion, transforming every corner of the woods into a space rich with history and meaning. Rigoni Stern leaves us with a clear message: to love trees is to learn to love life itself.
SPANISH REVIEW
Mario Rigoni Stern nos invita a un viaje extraordinario a través de los bosques en su obra Arboreto Salvatico, un libro que combina ciencia, literatura y la sensibilidad poética que caracteriza su estilo. Los cedros, abetos, castaños, nogales y tantos otros árboles cobran vida en sus páginas, donde cada uno es descrito no solo por sus características físicas, sino también por el alma que parece poseer, tejida a través de historias, anécdotas y leyendas acumuladas a lo largo de los siglos. Es inevitable recordar a Jean Giono y su célebre cuento del hombre que plantaba árboles al adentrarse en esta obra que exuda amor por la naturaleza.
Rigoni Stern logra un equilibrio admirable entre el rigor científico y la narrativa personal, creando un “círculo de árboles” íntimo que conecta al lector con sus propias memorias y con la memoria colectiva. Cada árbol que describe tiene un lugar especial en su vida, muchos de ellos plantados por sus propias manos y observados crecer alrededor de su casa. En este sentido, el autor nos muestra cómo los paisajes, al transformarse, también enriquecen el alma humana. La lectura nos invita a reflexionar sobre nuestra conexión con la naturaleza y a valorar la experiencia de plantar, cuidar y crecer junto a un árbol.
El libro destaca por su estructura en relatos breves, donde cada historia se dedica a un árbol en particular, evocando la conexión entre el autor y su entorno. Con su estilo sencillo y poético, Rigoni Stern entrelaza episodios de su vida con referencias históricas y culturales, llevando al lector a explorar la esencia de cada árbol. Esta obra recuerda a El sistema periódico de Primo Levi, donde cada elemento químico servía como eje para narrar experiencias vitales. Ambos autores, unidos por experiencias similares de guerra y una profunda amistad, comparten valores que resuenan en sus obras: la importancia de la memoria, la naturaleza y el legado que dejamos.
Leer Arboreto Salvatico es mucho más que una experiencia literaria; es una invitación a conectar con la naturaleza desde la reflexión y el asombro. Tal como lo describe el autor, cada árbol nos ofrece una lección de vida, justicia y resiliencia. Y para quienes tienen la fortuna de pasear entre bosques o sentarse bajo un tilo centenario, este libro se convierte en un compañero indispensable que transforma cada rincón del bosque en un espacio lleno de historia y significado. Rigoni Stern nos deja con un mensaje claro: amar los árboles es aprender a amar la vida misma.
// Autor: Mario Rigoni Stern // Editorial: Gallo Nero
SOBRE EL AUTOR
Mario Rigoni Stern (Asiago, 1 de noviembre de 1921 – Asiago, 16 de junio de 2008) fue un militar y escritor italiano. Fuertemente apegado a las montañas, realizó el servicio militar en el Cuerpo Alpino y luchó en la Segunda Guerra Mundial en Francia, Albania y Rusia. Después de encontrar trabajo en el catastro de Asiago, empezó a escribir sus memorias de guerra. Su primera obra, El sargento en la nieve (1953), fue un éxito inmediato que le valió el Premio Viareggio a la mejor ópera prima. Rigoni Stern colaboró con numerosos periódicos y revistas, escribiendo relatos que luego fueron recopilados en diferentes antologías. Su compromiso con la defensa de la naturaleza caracterizó tanto sus obras como su estilo de vida. Gracias a su escritura clara y comprensible, Rigoni Stern logra ordenar recuerdos y reflexiones a la vez que diseña un código ético para preservar el medio natural. Fue un guardián de la memoria y un profeta de la conciencia ecológica.